Como me enamoran tus ojos mi dueña,
como me enamora tu ternura al besar,
y hasta me parece que todo amanece
cuando me enceguece en la oscuridad
y hasta me parece que todo amanece
cuando me enceguece en la oscuridad.
Escúchalo a mis ruegos boquita de fuego,
y dame el embrujo de tu corazón;
mi pecho palpita como palomita,
que llora y se agita buscando al amor.
Escúchalo a mis ruegos boquita de fuego,
y dame el embrujo de tu corazón;
mi pecho palpita como palomita,
que llora y se agita buscando al amor.
(Quena)
Escúchalo a mis ruegos boquita de fuego,
y dame el embrujo de tu corazón;
mi pecho palpita como palomita,
que llora y se agita buscando al amor.
Escúchalo a mis ruegos boquita de fuego,
y dame el embrujo de tu corazón;
mi pecho palpita como palomita,
que llora y se agita
buscando al amor
buscando al amor
buscando al amor
(...)
y hasta me parece que todo amanece
cuando me enceguece en la oscuridad
y hasta me parece que todo amanece
cuando me enceguece en la oscuridad.
Escúchalo a mis ruegos boquita de fuego,
y dame el embrujo de tu corazón;
mi pecho palpita como palomita,
que llora y se agita buscando al amor.
Escúchalo a mis ruegos boquita de fuego,
y dame el embrujo de tu corazón;
mi pecho palpita como palomita,
que llora y se agita
buscando al amor
buscando al amor
buscando al amor